Actúa de manera integral en distintas fases del desarrollo de la planta. En las primeras etapas, antes de la floración, se encarga de regularizar el crecimiento de la planta, logrando entrenudos más cortos que contribuyen a una estructura más compacta y robusta. Durante la fase de floración, FAT-K favorece el amarre y cuaje del fruto, asegurando su crecimiento de manera uniforme y eficaz.

A medida que el fruto se engorda, este producto le aporta peso y consistencia, al mismo tiempo que promueve una mayor uniformidad en el color. Además, acelera el proceso de maduración, optimizando la calidad final de la cosecha.

Apto para cultivos como ajos, cebollas, pimientos, tomates, solanáceas, y hortalizas.